Nos encontramos en Dios

 

Imágenes de Dios 

Nos encontramos en Dios 3 

 Lunes 29 de noviembre de 2021   

 

 

El padre Richard nos recuerda que fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, lo cual nos ofrece una base sólida desde la que podemos operar en el mundo. 

  

La historia bíblica de la creación dice: "Hagamos al hombre a nuestra imagen" (Génesis 1:26). El pronombre plural es un primer indicio de que vamos a entrar en una vida relacional, participativa y compartida. El secreto está de alguna manera plantado dentro de nuestra identidad más profunda y se revela lentamente —si estamos atentos a esta "reverencia que zumba en [nosotros]", como Jane Fonda lo describió una vez. 1 

  

Nuestro ADN es divino, y la morada divina nunca se gana con ningún comportamiento, membresía de grupo o ritual alguno, sino que solo se reconoce y se realiza (ver Romanos 11:6; Efesios 2:8-10) y, por lo tanto, se enamora. Cuando estemos listos, nos decepciona y abruma por el misterio ilimitado de nuestra propia humanidad. Sabremos que estamos bajo la misma cascada de misericordia que todos los demás y recibimos una gracia radical inmerecida, que es la causa fundamental de todo ser animado. 

  

Cuando comencé en el ministerio a principios de la década de 1970 en Cincinnati y trabajé con jóvenes, parecía que pasaba la mayor parte del tiempo tratando de convencer a los adolescentes de que eran buenos. Todos parecían odiarse y dudar de sí mismos sin cesar, a menudo con un poco de ayuda de los padres y el clero. Más tarde lo vi también en adultos, quienes también tenían mucha práctica en odiarse y temerse a sí mismos. Lo que las Escrituras nos prometen es que somos objetiva e inherentemente hijos de Dios (ver 1 Juan 3:2). ¡Y no puedes cambiar eso! Esto no es valor psicológico; es un valor ontológico, metafísico, sustancial que no se puede ganar ni perder. Cuando esta imagen de Dios dada se convierte en nuestra propia imagen operativa, ¡estamos libres en casa! ¡Un evangelio así es la mejor buena noticia que cualquiera podría esperar! 

  

Estoy convencido de que tanta culpa, autoimagen negativa, odio a sí mismo y preocupación por uno mismo se produce porque hemos tomado nuestras señales e identidad de un mundo competitivo y de comparación. Pero Jesús nos dijo que nunca tomáramos este mundo como normativo. Jesús pregunta: "¿Por qué se miran unos a otros en busca de aprobación en lugar de la aprobación que proviene del único Dios?" (Juan 5:44). ¡Para empezar, muchos de nosotros aceptamos una imagen propia exitosa o baja dentro de un sistema de imágenes falsas! (Inteligente, guapo, elegante, perdedor —son solo palabras que los humanos crean). Esto nunca funcionará. Debemos encontrar nuestro verdadero yo "escondido dentro de Cristo en Dios", como dice Pablo en Colosenses 3:3. O, como Teresa de Ávila imaginó a Dios diciéndole: “Si quieres encontrarme / búscame en ti. 2 Entonces no subimos y bajamos, sino que estamos construidos sobre la Roca de las Edades. Es la forma misma de toda madurez espiritual, independientemente de la religión a la que pertenezcamos. 

 

1 Anthony DeCurtis, “Jane Fonda,” Rolling Stone, no. 1025/1026 (May 2007): 102–5. 

2 Teresa, “Seeking God,” in The Collected Works of St. Teresa of Avila, vol. 3, trans. Kieran Kavanaugh and Otilio Rodriguez (ICS Publications: 1985), 385.